La implementación fue motivada por un informe alarmante del Instituto Australiano de Criminología: tres de cada cuatro usuarios habían sufrido algún tipo de violencia sexual
En Australia, la seguridad de los usuarios de plataformas de citas en línea está a punto de mejorar con la entrada en vigor de un nuevo código de conducta que busca reducir la violencia sexual facilitada por estas aplicaciones.
La implementación fue motivada por un informe alarmante del Instituto Australiano de Criminología. Este estudio, realizado en 2022, reveló que tres de cada cuatro usuarios de aplicaciones o sitios web de citas en el país habían sufrido algún tipo de violencia sexual a través de estas plataformas durante los cinco años previos a 2021.
Los datos evidenciaron un problema sistemático de abuso y acoso en entornos digitales, y dejaron en evidencia la necesidad urgente de medidas de seguridad más efectivas. El gobierno puso foco en la investigación y decidió trabajar en un cambio para solucionar esta situación.
“El código comenzó a aplicarse este martes y forma parte de una estrategia más amplia para frenar los incidentes de violencia y crear espacios digitales más seguros para quienes buscan relaciones en línea”, aseguró la ministra de Comunicaciones, Michelle Rowland, según informó AP.
Igualmente, las plataformas de citas en línea tendrán hasta el 1 de abril del próximo año para implementar todos los cambios estipulados por el código de conducta, momento a partir del cual su cumplimiento será estrictamente monitoreado.
Bumble, Grindr y Match Group Inc., la empresa que administra aplicaciones como Tinder, Hinge, OKCupid y Plenty of Fish, son algunas de las plataformas que acordaron adherirse a las nuevas normas. Estas compañías representan el 75% de la industria de citas en línea en Australia y desempeñaron un papel clave en el desarrollo de este código.
“Es necesario que exista un proceso de tramitación de quejas. Se trata de una característica bastante básica que los australianos habrían esperado desde el principio”, aseguró Rowland.
Mientras que la ministra de Servicios Sociales, Amanda Rishworth, expresó que el código de citas ayudaría a los australianos a elegir qué aplicaciones usar, según ABC News Australia.
“Todos merecen vivir una vida libre de violencia, sin importar dónde se encuentren, y esto incluye Internet. Debemos crear comunidades, tanto en el mundo físico como en línea, donde todos sean tratados por igual y con respeto”, dijo según el mismo medio.
El nuevo código de conducta establece una serie de medidas para que las plataformas de citas en línea en Australia detecten y prevengan posibles incidentes de violencia sexual. Las aplicaciones deberán contar con sistemas avanzados que permitan identificar y abordar rápidamente cualquier comportamiento dañino.
Esto implica el uso de tecnología para monitorear posibles infracciones y la capacidad de tomar medidas inmediatas, como el cierre de cuentas de infractores que violen las políticas de seguridad en línea de las empresas.
Además, el código exige que los mecanismos de denuncia y queja sean más visibles, accesibles y transparentes para los usuarios. Estos mecanismos permitirán a las personas reportar conductas inapropiadas de manera más efectiva y a las plataformas actuar de forma rápida.
También se implementará un nuevo sistema de calificación para evaluar públicamente la capacidad de cada aplicación para cumplir con sus obligaciones de seguridad, lo que proporcionará a los usuarios información clara sobre qué plataformas son más seguras para su uso.
El gobierno espera que estas medidas no solo sirvan como una herramienta preventiva, sino que también permitan a los australianos tomar decisiones más informadas al momento de elegir una aplicación de citas.
Las plataformas que se adhieran al código tendrán la obligación de proporcionar informes periódicos al comisionado de seguridad electrónica, detallando el número de cuentas canceladas en Australia y describiendo sus acciones de moderación de contenido.
Además, deberán interactuar proactivamente con las autoridades, incluyendo la presentación de quejas en casos de amenazas inminentes a la seguridad. “Si hay motivos para prohibir a un individuo en particular utilizar una de esas plataformas, se lo bloquea en todas las plataformas”, sentenció Rowland.